Los discípulos notaban que aquella noche no era como las demás. Jesús había tenido un tremendo gesto de humildad: el Maestro les había lavado los pies a cada uno. Y ahora, por sus palabras, parecía que se despedía, que se iba, pero ellos no comprendían muy bien a qué hacía referencia. Pedro se atrevió a preguntar: «Señor, ¿adonde vas?» (Juan 13, 36).

soledad-abandono-compania-jesus

Jesús regresaba al Padre (Juan 13, 1). Los discípulos se llenaron de tristeza: su Maestro se marchaba. Él trataba de tranquilizarlos: «No se turbe su corazón ni se acobarde» (Juan 14, 1 y 27), «no los dejaré huérfanos» (Juan 14, 18), «si me amaran, se alegrarían» (Juan 14, 28), «les conviene que me vaya» (Juan 16, 7)… «¿Cómo nos puede convenir eso, Señor? ¡No te vayas, amigo de nuestras almas! ¿Cómo te amaremos ahora en la distancia? ¿Quién nos enseñará como Tú nos has enseñado? ¿Quién nos dará la paz que solo hemos encontrado en Ti?».

El que me ama guardará mi Palabra

Jesús respondió a sus tres preguntas. A la primera dijo: «El que me ama guardará mis palabras; y mi Padre lo amará, y vendremos a él y habitaremos en él. El que no me ama no guarda mis palabras» (Juan 14, 23-24). Para mostrar a Jesús que lo amamos no necesitamos una cercanía física con Él, sino vivir su Evangelio, cumplir los mandamientos. Si se guardan sus palabras, Él vivirá no cerca, sino ¡dentro de nosotros!

El Espíritu Santo les enseñará y recordará todo

A la segunda pregunta, Jesús contestó: «El Paráclito, el Espíritu Santo, que el Padre enviará en mi nombre, será quien se lo enseñe todo, recordándoles todo cuanto les he dicho» (Juan 14, 26). Quizá no tenemos a Jesucristo al lado para explicarnos todo lo referente al Reino de Dios, como lo hizo con tantas personas, a través de sus parábolas. Pero contamos con la asistencia del Espíritu Santo y sus dones para comprender en profundidad las realidades espirituales, las verdades sobre Dios y sobre nosotros mismos.

La paz les dejo, mi paz les doy

Por último, Jesús les afirmó a sus discípulos: «La paz les dejo, mi paz les doy. Pero yo no doy la paz como la da el mundo» (Juan 14, 27). El Maestro sabe que necesitamos de su paz y nos la da como regalo, pero a la vez nos advierte que no es una paz de bienestar material, con ausencia de dificultades. Es la paz —y la alegría— de quien se sabe amado por el Padre, que puede más que cualquier problema.

Convéncete: Jesús nunca abandona a sus discípulos. No lo abandones tú a Él.

texto bíblico base

Juan 14, 23-29 (leer).

textos bíblicos de apoyo

Antiguo Testamento

Deuteronomio 31, 8 (leer).

1 Samuel 12, 22 (leer).

Nehemías 9, 31 (leer).

Salmo 94 (93), 12-14 (leer).

Oseas 11, 8 (leer).

Nuevo Testamento

Mateo 28, 20 (leer).

Preguntas para meditar, reflexionar y orar
  1. ¿Amo a Jesús? ¿Vivo como Él pide en el Evangelio? ¿Cumplo sus mandamientos?
  2. ¿Me acuerdo del Espíritu Santo durante el día? ¿Lo invoco? ¿Le pido sus dones?
  3. ¿Encuentro en Jesús mi paz y mi alegría? ¿Soy testimonio de esa paz?

3 comentarios en “Jesús nunca abandona

  1. La.palabra nos enseña como debemos agradar a Dios.. y es por medio de guardar su palabra, de hacer lo que nos pide y de tenerla siempre presente en nuestros corazones que el refugio de el amor u misericordia que el nis tiene quien nos guia por medio del espiritu santo.

    Me gusta

  2. «¿Cómo nos puede convenir eso, Señor? ¡No te vayas! ¿Cómo te amaremos ahora en la distancia?.” Este evangelio nos recuerda que aún cuando muchas veces no entendamos, no veamos claramente el porqué de las cosas, nunca debemos perder la fe y aunque las circunstancias parezcan adversas e insólitas, confiemos y creamos en El, que siempre sabe lo que es mejor para nosotros. Abandonemosnos a su voluntad. Vivamos confiados en el camino que nos muestra, aunque nuestro limitado entendimiento no lo entienda, siempre será el mejor camino.

    Me gusta

  3. Vivir confiados en el amor de Nuestro Señor nos lleva a vivir agrandándolo en todo momento vivir en armonía paz y perdonando cómo siempre El hace con sus hijos
    Si el vive en nuestros corazones estamos seguros que guia nuestros pasos y nos muestra el camino a seguir guidos por el Espíritu Santo

    Me gusta

Deja un comentario