Jesús se presenta a sí mismo como «el Buen Pastor». Quienes se reúnen en torno a Él son las «ovejas de su rebaño» (Salmo 99, 3). ¿Qué caracteriza a esas ovejas? Jesús mismo lo indica: «Mis ovejas escuchan mi voz, y yo las conozco, y ellas me siguen…».
Balidos y vítores
